Según la Organización Mundial de Salud (OMS) una en cada cinco personas en el trabajo puede padecer un problema mental.
La salud mental es un tema que por mucho tiempo ha sido
tabú en gran parte de nuestra población, especialmente en los lugares de
trabajo, donde los empleados temen sentirse juzgados. Pero los expertos están
de acuerdo en que normalizar esta situación es clave para mejorar la calidad de
vida de los ciudadanos y la satisfacción laboral.
Según la Organización
Mundial de la Salud (OMS), la salud mental es "un estado de
bienestar en el que la persona es capaz de hacer frente al estrés normal de la
vida, de trabajar de forma productiva y de contribuir a su comunidad". Que
el estrés complique tus tareas diarias y notarte menos productivo son llamadas
de atención.
Es importante que en los lugares de
trabajo se tomen previsiones ante la presencia del estrés y trastornos de
ansiedad tras las cargas laborales. Comentar con tus compañeros o tus jefes que
estás sufriendo algún tipo de malestar emocional o mental ayuda a que puedan
entender mejor tus comportamientos o reacciones en la oficina. La OMS
recomienda:
· Ayudar a reconocer los signos de la depresión,
incluyendo: la tristeza excesiva, la desesperanza, la perdida de interés en
actividades y los cambios de apetito o del sueño.
· Buscar ayuda cuando lo necesites, y apoyar a quien
esté sufriendo.
· Hablar con su empleador sobre sus necesidades
emocionales.
· Practicar la resiliencia y auto cuidado.
La cultura empresarial es un punto clave. Los
empleados tienen que sentirse protegidos y seguros. Los expertos también
señalan que es necesario que las conversaciones sean "un acto proactivo y
voluntario". La idea es conseguir un ambiente de confianza para que el
trabajador se sienta cómodo.